Mogli ¡Cuéntanos una historia!

Los benjamines del grupo siguen disfrutando del campamento para  ellos solos, van y vienen y hacen y deshacen a su antojo, lo que no quita que en algún momento no puedan evitar echar un poco de menos el bullicio y la compañía de los mayores, que a fin de cuentas, son el espejo en el que se miran, donde ven reflejado lo que les gustaría ser o hacer cuando pasen unos años.

Turno de colada para los castores y castoras, que ya lo venían necesitando, más aún después de darlo todo ayer en el día de guarro. Dicho y hecho, vaciaron sus macutos, donde durante este tiempo iban guardando la ropa sucia y se pusieron manos a la obra entregados totalmente a la causa, dejando momentos y comentarios que bien habrían valido para incluir en el mejor anuncio de detergente para ropa (publicistas del mundo, aquí hay un filón por explotar).

Por la tarde han recreado una particular versión de la toma de Granada, con moros y cristianos enfrentados, para finalmente acabar dándose cuenta que la cooperación era la única forma de que cada bando consiguiese sus objetivos.

Lobatos y lobatas han convertido el campamento en un enorme escenario de teatro, lo que les ha servido para aprender a expresar e identificar emociones, sentimientos y situaciones diversas, empleando altas dosis de imaginación e improvisación, que de eso van más que sobrados.

Para empezar han tenido un pequeño calentamiento con juegos cortos, tales como tener que identificar el estado de ánimo de un participante representando a continuación el contrario, o tener que tocar con los ojos vendados a otra persona que está quieta en una pose y teniendo que reproducirla imitándola…, para finalmente meterse de lleno en la actividad, que no era otra que formar una compañía de teatro.

Cada grupo de teatro lo formaran 5 personas, que tendrán que pensar una obra de teatro, ponerle nombre, incluyendo además en la trama, personajes o situaciones que les haya tocado al azar, y todo esto con apenas unos minutos para prepararlo ya que la idea es hacerlo ágil, y que la improvisación fuera una parte importante del juego.  

Representadas todas las obras con un tremendo éxito de público y crítica, el kraal no se escaparía de su prueba y todos los grupos les han retado, reto que no han podido, ni querido rechazar, a representar “Los monos cubanos y las salchipapas”, con la que han estirado un poco más las risas y la diversión.

Por la tarde ha sido el día de la selva, durante el cual las distintas especies (panteras, serpientes, osos y lobos) se echan unas a otras las culpas por la desaparición de Mogli, acabando enfrentadas entre ellas. 

Compitiendo por tener la razón, intentarán encontrar los plátanos y lianas escondidas antes que los demás, formar una figura humana que representase su “tótem” o deshacer lo más rápido posible una enorme cebolla humana, para lo cual cada especie contaba con un hándicap diferente (por ejemplo los lobos tenían que hacerlo desplazándose a cuatro patas), y así entre una cosa y otra Mogli apareció por allí mirándoles sorprendido ante tanto revuelo, ya que para nada estaba enfadado, él lo que único que quería era dar un paseo por la selva, sentía mucho la confusión , pero para disculparse, esta noche nos regalará una historia, su verdadera historia, la verdadera historia de Mogli que pocos conocen.

Dicho y hecho, allí estaba Mogli en la velada, con los castores y lobatos sentados en círculo como público, listos y esperando a escuchar la verdadera historia de Mogli de la boca de su mismísimo protagonista, historia que a medida que iba avanzando, tan pronto dejaba paso a la sorpresa y la risa, como al miedo y al alivio, acercando finalmente el sueño a sus entregados espectadores, que casi sin darse cuenta dormían ya en el saco con una sonrisa de oreja a oreja, deseando seguir soñando grandes aventuras en medio de la selva rodeados de osos, panteras, lobos y serpientes.

Rangers, continúan su marcha, dejan La Peza, mirando un poco hacia atrás, con la pena de quien de alguna manera tiene la sensación de dejar un pequeño tesoro, y seguirán dirección a Lopera, desde donde tienen intención de acercarse al Embalse.

Una vez en Lopera han hecho tiempo con un taller de masajes, hasta que por la tarde la concejala ha llegado con las llaves del local en el que habrían de pasar la noche, y les ha hecho una propuesta para la que han sido todo oídos… “en mi casa tengo piscina ¿os apetecería daros un baño?” “¡que preguntas nos hacen! ¡¡¡Claro!!!” A cambio el grupo se comprometió a limpiar los alrededores del local en el pasarán la noche y pegar por todo el pueblo, los carteles que anuncian las fiestas de este fin de semana. Estos chicos y chicas más que de marcha parece que estuvieran haciendo un recorrido para probar la calidad de las piscinas de los pueblos por los que pasan y degustar sus especialidades culinarias. 

Por la noche después de jugar con los niños y niñas del pueblo a un bote, todavía tendrían tiempo y ganas de hacer una actividad de supervivencia, que acabó con las pocas energías que les quedaban, ya que casi eran las 2.00 h cuando se estaban durmiendo, para recuperar las fuerzas necesarias que mañana ya les llevarán de vuelta al campamento.

Pios y Rutas siguen de Raid y todo lo que podemos decir es “No news, good news”

Mañana más.