Sistema Solar Scout Pinar

La pequeña y joven aldea scout sigue avanzando gracias al trabajo y colaboración de todas las ramas. Una aldea en la que durante el día hace calorcito, aunque es soportable, y por las noches refresca tanto como para agradecer ponerse el… ¡¡abrigo!!

A la hora de dormir, en el saco no pasamos frío, aunque hay quien desconcertado por estos cambios de temperatura, ayer parecía más una cebolla que otra cosa dentro de el, intentando evitar cualquier pérdida de calor.

El lugar es verde y muy grande, con muchos árboles y al fondo las montañas rodeándolo todo, es perfecto. Tenemos el río al lado y apenas a 3 minutos andando unas estupendas piscinas naturales.

Empezamos el día con nuestra gran asamblea matutina ¡Buenos días!

Hoy hemos repartido los amigos y amigas invisibles, a quienes tendremos que cuidar durante el campamento y hacerle un pequeño regalo para entregárselo cuando acabe.

Nuestra campa es un pequeño sistema solar en el que todo gira entorno a la zona de kraal, la estrella que nos da calorcito y hace posible la vida aquí. Por una parte estarían los planetas interiores, representados por castores, que reciben tanto calor del kraal que parecen palomitas de maíz saltando constantemente y por todas partes del campamento y un poco más lejos lobatos, que comparten con castores esa capacidad de estar en todas partes y en ninguna a la vez. En el punto medio se situarían los Rangers, mientras que los pioneros serían el primero de los planetas exteriores, y los Rutas, ubicados en el fondo de la zona, están en el límite de la atracción gravitacional que ejerce nuestra estrella sobre los planetas que orbitan a su alrededor.  

El mundo castor hoy ha terminado de montar su zona, decorándola con carteles y flores. También se han encargado de hacer algo tan imprescindible en el campamento como es el buzón del que durante las asambleas se recogen y leen los mensajes, peticiones, sugerencias, agradecimientos y quejas que se envían. Por la tarde han estado en remojo como garbancitos en las piscinas naturales, como los mismos garbancitos del cocido que esta mediodía se han resistido un poco a tomar, aunque finalmente la cosa no ha ido a mayores y se han cumplido los acuerdos de mínimos. Entre remojón y remojón todavía les ha dado tiempo a hacer un taller de mitología griega, dirigido por sus particulares dioses y diosas del olimpo.

 La eficacia de los lobatos está fuera de toda duda, se han empleado a fondo a terminar su zona que han delimitado con una pequeña valla y decorado con carteles. Después se han encargado de montar las mesas y estanterías en la cocina para dejar los potos. También han cuidado el interior de su tienda decorándolo con pequeños móviles de planetas que les acompañaran en sus conversaciones nocturnas. Entre tanta actividad todavía han tenido tiempo para empezar a matarse a besos, y es que están totalmente entregados al killer.

En el killer cada participante tiene un objetivo al que tiene que eliminar dándole un beso sin ser visto por nadie, si lo consigue, su objetivo es eliminado y su nuevo objetivo será el que tenía la persona que acaba de eliminar. En cambio si no lo consigue es eliminado y entrará en el cementerio. Tan entregados están que ya tenemos media rama en el cementerio, y más por ser pillados que por pillar a sus objetivos, la impulsividad les puede, por lo que ahora los pobres muertos del cementerio se divierten haciendo cábalas y combinaciones para adivinar los objetivos de los que siguen vivos y avisarles para ponérselo más difícil.

Por la tarde también han estado en las piscinas naturales con los castores y allí se han duchado todos, antes de volver al campamento.

Los Rangers, llegaron ayer de Griebal, y aunque más cansados y tarde que los demás se pusieron manos a la obra para cumplir con su parte de la tarea, y hoy han dedicado todo el día a hacer los fregaderos y terminar de acondicionar su zona y el único “lujo” que se han podido dar hoy ha sido una relajante ducha en el río.

Los pioneros se han hecho cargo de la excavación de las letrinas y de montar la estructura que las cubre, puerta incluida, para que esos ratos de intimidad, lo sean de verdad. Terminadas sus obligaciones, le han echado una mano a los rutas con el mástil.

Los rutas por su parte además del mástil, han montado las estanterías, el botiquín y hecho zanjas alrededor de su zona y alguna más, para que en caso de que llueva no se inunden y entre agua en las tiendas.

Llega la cena en forma de sopita calentita que se agradece a más no poder y unos filetes de lomo, que nos dan el último empujón para disfrutar de la velada, uno los mejores momentos del día, en la que nos divertimos y acompañamos cantando al ritmo de las guitarras y los tambores, hoy más corta de lo habitual para que nos de tiempo a descansar antes de las sorpresas que nos esperan esta noche en forma de súper y raid para unos y de marcha para otros, pero esa historia ya será mañana. 

Buenas noches desde el sistema solar Scout Pinar